ANARQUISTAS VENGADORES

ANARQUISTAS VENGADORES

(pido excusas por “secuestrar” el título del libro homónimo escrito por FERNANDO BARBERO CARRASCO en Ediciones Queimada).

“No busqué afirmación social, ni una vida acomodada, ni tampoco una vida tranquila. Para mí elegi la lucha. Vivir en monotonía las horas mohosas de lo adocenado, de los resignados, de los acomodados, de las conveniencias, no es vivir , es solamente vegetar y transportar en forma ambulante una masa de carne y de huesos. A la vida es necesario brindarle la elevación exquisita, la rebelión del brazo y de la mente. Enfrenté a la sociedad con sus mismas armas, sin inclinar la cabeza, por eso me consideran, y soy, un hombre peligroso”.Severino di Giovanni (1901-1931), anarquista italiano.

Hay ciertos realizadores cinematográficos que, por confusión ideológica, reducen el anarquismo a unos cuantos estereotipos singulares, no es extraño, ya que, con frecuencia los historiadores  “rebajaron” la historia anarquista a una serie de lugares comunes estériles, y sería necio esperar que los directores de cine se apartaran de ciertas verdades a medias que condimentan textos aparentemente acreditados, como por ejemplo, ERIC HOBSBAWM en sus Revolucionarios: Ensayos contemporáneos, donde realiza desdeñosos comentarios sobre el anarquismo. Esto ha motivado que, frecuentemente, se den películas cuya visión de esta ideología muestra una falta de sutileza, a menudo, irrisoria.

Desde los orígenes del cine hasta el momento actual, la demonización de los anarquistas resulta evidente en películas realizadas tanto por autores comerciales de poca monta como por otros dotados de una sensibilidad menos común,el anarquista homicida de mirada salvaje siempre ha dado mucho juego en el cine. De muestra un botón: en CIUDADANO KANE (1941- Orson Welles )al paradigmático magnate periodístico no se le ocurre otra forma de difamar a un hombre sospechoso de asesinato que lanzarle el epíteto de “anarquista”, aun cuando el público tiene conciencia simultáneamente de que la propia falta de escrúpulos de Kane anula su capacidad de dar juicios políticos razonables.Sirva de ejemplo como excepción a este tipo de tratamiento, el caso de Behold a Pale Horse(Y LLEGÓ EL DÍA DE LA VENGANZA) -1964- de Fred Zinnemann, donde da una imagen más equilibrada y noble de un saboteador anarquista, a pesar de que al final se “regañe” al héroe. Este filme está basado libremente en las hazañas de Francisco Sabaté, maquis libertario que intentó derribar el régimen de Franco, mediante la violencia estratégica en la década de los 60.

Enlazando con el título del artículo, y después de esta larga digresión conviene saber que en nuestro historia, hay varios ejemplos de militantes anarquistas, la mayoría libertarios cultivados, algunos incluso de pensamiento pacifista , que en un período determinado que los ácratas de este país denominaron “Propaganda por el Hecho” (desde finales del s. XIX) decidieron hacer frente a la represión del Estado con actos violentos. Los más destacados: PAULINO PALLÁS que en el año 1893 arrojó una bomba al general Martinez Campos; JOAQUÍM MIQUEL ARTAL que intentó dar muerte a Antonio Maura en 1903; MICHELE ANGIOLILLO, nacido en Italia, que en agosto de 1897 dispara y mata a Cánovas del Castillo, MANUEL PARDIÑAS SERRANO, de Huesca, en noviembre de 1912 dispara contra el presidente del Consejo de Ministros José Canalejas Méndez que muere poco más tarde. Hay otros más, pero conviene destacar a  MATEO MORRAL ( a finales del 2013 saltó la noticia en los medios de información que un llamado comando Mateo Morral había explotado una bomba en la basílica del Pilar de Zaragoza), ácrata español, culto y colaborador de la Escuela de Ferrer i Guardia, asistía a menudo a las tertulias de Valle-Inclán y de los hermanos Baroja, arrojó una bomba envuelta en un ramo de flores, al paso de la carroza de Alfonso XIII y Mª Eugenia de Battemberg el día de su boda (31 Mayo 1906), salieron ilesos.La bomba que arrojó era de fabricación casera de las llamadas “de inversión” , conocidas como bomba de Orsini. Y esto nos lleva a otro atentado cometido anteriormente, en 1893,  por SANTIAGO SALVADOR FRANCH que arrojó dos bombas Orsini en el Teatro del Liceo de Barcelona; las tiró desde la planta 5ª, solo una explotó causando 22 muertos y 35 heridos. Se representaba la ópera Guillermo Tellde Rossini.

Existe un documental titulado LA BOMBA DEL LICEO (2010) dirigido por CARLES BALAGUÉ que trata este episodio. En él, a través de testimonios de varias personas como el novelista Eduardo Mendoza o el historiador LluisPermayer, entre otros, se regresa a la Barcelona de finales del XIX, principios del XX con una burguesía emergente y un anarquismo que empezaba a arraigar con fuerza en Cataluña. Trata más del Liceo que del enfrentamiento social de entonces, pero se ve con interés y resulta ilustrativo.

Es curiosa la personalidad del director CARLES BALAGUÉ (Barcelona 1949), abogado, crítico, director y exhibidor de cine(desde el año 1996 programa las Salas Méliès de Barcelona, dedicadas a la recuperación del cine clásico y a la difusión del cine europeo). Entre su filmografía caben destacar otros dos documentales, además del citado. Son: LA CASITA BLANCA: LA CIUDAD OCULTA (2001/2) que trata del meublé más famoso de Barcelona en la década de los 40/50 y el atraco que le realizó  JOSE LUIS FACERÍAS, maquis urbano libertario en el año 1949. El otro es ARROPIERO, EL VAGABUNDO DE LA MUERTE (2008), recoge el recorrido vital de Manuel Delgado Villegas, el Arropiero, el asesino en serie más importante de la España del siglo XX, autor de al menos 48 asesinatos.

Lo que no merece la pena es ver el tratamiento que sobre el atentado del Liceo se realizó en el franquismo de la obra de Ignacio Agustí: La ceniza fue árbol, en el film MARIONA REBULL (1947) de Jose Luis Saenz de Heredia. Hubo, también, una adaptación posterior para TVE en el año 1976. Sin más.

Le métèque

 

Share