El primer día de la Sesión de Emergencia de la Organización Mundial de la Salud se consideró la posibilidad de adoptar una Convención especial sobre respuesta a las pandemias o el denominado “Acuerdo sobre pandemias”. El Acuerdo se basa en un “informe pandémico” especial publicado por la OMS el 23 de noviembre de 2021 y una “guía pandémica” publicada el 22 de septiembre de 2021.

Estos documentos, en particular, proponen:

– el derecho exclusivo de la OMS a anunciar el inicio de la próxima “pandemia”;

– abolición del “imperio de los derechos humanos” en caso de la aparición de regímenes “pandémicos”;

– restricciones radicales a los derechos de los sindicatos;

– dotar a las organizaciones sin fines de lucro y otras estructuras indefinidas del derecho a participar en pie de igualdad con los estados en el establecimiento de leyes internacionales;

– la obligación de los países de solicitar ayuda exterior si no pueden hacer frente a la “pandemia” por sí mismos.

Bajo la cláusula “dotar a las organizaciones sin fines de lucro y otras estructuras indefinidas del derecho a participar en igualdad de condiciones con los estados en el establecimiento de leyes internacionales”, los países firmantes transfieren la totalidad del poder legislativo y ejecutivo a las manos de estructuras indefinidas, de modo que el presidente y el gobierno están perdiendo sus poderes en manos de estas esctructuras de poder supranacional.

¿No creías en los cuentos y las teorías de la conspiración sobre el gobierno mundial y el Nuevo Orden Mundial? Aquí está, ya ha llegado.

 

Sesión especial de la Asamblea Mundial de la Salud 29 de noviembre de 2021 – 1 de diciembre de 2021.

Del 29.11 al 1.12 se ha celebrado oportunamente una reunión especial de la asamblea de la organización mundial de la salud para promover un órgano que coordine un nuevo poder de la OMS en la preparación ante futuras pandemias

En todos los documentos se remarca y se repite el espíritu de esta reunión, la equidad y la inclusividad y transparencia a la hora de cristalizar este nuevo órgano.

 Conocemos bien la transparencia y la equidad con la que actúan y más parece que quieran crear un órgano supranacional que distribuya vacunas con la eficacia que han demostrado durante esta pandemia y que es de lo que se quejan los ponentes que han hablado en la sesión de clausura. No nos han llegado las vacunas prometidas

De su preocupación en la preparación frente a futuras pandemias sorprende que la única medida sanitaria que mencionen sean las vacunas como si fuera la única herramienta para tratar un problema venidero.

Sorprende también que recaiga en las zoonosis el origen de dichas pandemias, cuando aún no se haya demostrado que la pandemia en la que estamos inmersos haya sido un animal el origen y que las hipótesis de un escape/liberación del patógeno de un laboratorio donde se ha estado demostradamente trabajando en como refinar su eficacia para infectar humanos no se menciona nada, osea incrementar la seguridad de los estudios de riesgo en secuencias génicas potencialmente peligrosas para la humanidad

 Pero en su buenismo unitario reclaman un órgano ejecutivo que dote a la OMS de poderes para dictar medidas de alcance global que hagan frente a posibles pandemias

Ya sabemos que todas las pandemias que hemos sufrido hasta ahora siempre han estado asociadas a accidentes o a experimentos de riesgo que han terminado poniendo en los medios una alarma que ha sido convenientemente utilizada

Ya sabemos la transparencia con la que viven y como las medidas que implementan está basada en la ciencia, como por ejemplo de la adopción de la PCR como Estándar de Oro que se ha vuelto incuestionable y que es lo mejor que le ha podido pasar al pobre virus SARS CoV2 que tan famoso lo ha hecho pues con esa prueba han conseguido crear una pandemia cuando tras un año se comprueba que la supuesta enfermedad que está amenazando a la humanidad no es más peligrosa que la misma gripe que nos acompaña desde los principios de la humanidad que casualmente ataca periódicamente cuando llega el frío.. Aún no han conseguido una vacuna eficaz contra la gripe pero necesitamos un órgano supranacional para combatirla sin tener en cuenta que con una medicina preventiva basada en una vida sin estrés, una alimentación sana sin demasiados químicos y un ejercicio físico regular,, y eso si, también cuando llega el otoño abrigarse convenientemente y evitar los cambios bruscos de temperatura se llega a una unidad de acción que en realidad no cuesta demasiado dinero ni necesita de comités de coordinación

Se habla mucho de los hospitalizados que han evitado las vacunas. Tambien se pone énfasis en que evitando la pandemia se actúan en responsabilidad comunitaria y que con las vacunas no se saturan las UCI’s y se evitan muertes innecesarias, cuando las unidades UCI’s han sido reducidas progresivamente, el número de sanitario se ha ido reduciendo progresivamente y la atención médica se ha ido degradando en los últimos años pero ahora necesitamos una guerra contra las pandemias que tendrá los mismos resultados que las demás guerras globlales que nos han vendido. Guerra contra las drogas y sube el tráfico de droga, guerra contra el terrorismo internacional, y sube el terrorismo

Ahora que las sospechas de que esta pandemia es fabricada nos enteramos que necesitamos un órgano que coordine la acción de todos los países para qué? Para que nadie se haga responsable de la aplicación de unos medicamentos que se ponen en el mercado sin la suficiente experimentación y que la requerida experimentación estaba poniendo en un problema económico a las empresas que fabrican dichos productos y como ellos mismos han proclamado gracias a la pandemia ahora pueden poner en el mercado medicamentos de una tecnología que aún no sabemos qué consecuencias va a tener y que ya sabemos está provocando que por una parte no se reduce la transmisión de la enfermedad que supuestamente tendría que controlar y por otra parte tras un año de aplicación, la mortalidad en general es mayor en todos los países donde se está usando.

Pero en su afán buenista de ser los adalides de la preparación ante amenazas y siempre basándose en los principios más escrupulosos de la ciencia hacen hincapié en que hay que combatir la desinformación, cuando comprobamos día a día lo que para estos significa desinformación y como se combate. Censurando cualquier tipo de debate crítico que suponga un cuestionamiento de la medida estrella de este movimiento solidario que es la vacuna

 Espero lo mejor de esta unidad de países en pos de una salud para todos, pero me gustaría poder no ser pesimista e interpretar su lenguaje como falso e hipócrita y donde dicen equidad habrá peleas por quien es más complaciente con las medidas a adoptar de modo que reciban los suficientes fondos que necesitan sus países para avanzar en el desarrollo al que aspiran que a lo mejor dicho desarrollo en el que se les obligará a abandonar su manera tradicional de vivir o de tratar las enfermedades en beneficio de empresas que les van a vender productos de dudosa seguridad y eficacia y con los que se van a tener que endeudar en una nueva forma de colonialismo de este siglo donde los países desarrollados chantajean a los subdesarrollados con un ideal de salud que en realidad se convierte en una trampa que los empobrece y a la larga los enferma

 El resultado de esta reunión es que en Marzo se volverán a reunir para acordar una forma de avanzar.

Espero que hasta entonces hayamos podido convencer a nuestros gobiernos de que esta estrategia de contemplar la naturaleza como una amenaza que combatir es una pesadilla de ignorantes necesitados de enemigos con los que atemorizar a la población para ser ellos los que dirijan las soluciones que jamás solucionan pues lo único que buscan en realidad es mover el dinero de los impuestos que nos extraen para financiar su nivel de vida ostentoso y vacío.

Es el fin de un comienzo esperanzador.

El mundo en conjunto: Establecimiento de un órgano intergubernamental de negociación para reforzar la prevención, la preparación y la respuesta frente a las pandemias

Proyecto de decisión propuesto por Albania, Argentina, Australia, Bangladesh, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Egipto, Fiji, Georgia, India, Indonesia, Islandia, Israel, Japón, Estados miembros del Grupo Africano, Estados miembros de la Unión Europea, México, Mónaco, Montenegro, Nepal, Noruega, Nueva Zelanda, Pakistán, Panamá, Paraguay, Perú, República de Corea, República de Moldova, Serbia, Singapur, Suiza, Tailandia, Trinidad y Tobago, Túnez, Turquía, Ucrania, Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, Estados Unidos de América, Uruguay y Vanuatu.

Reconociendo, cómo no, la necesidad de subsanar las deficiencias en materia de prevención, preparación y respuesta a las emergencias sanitarias, en particular en lo que respecta al desarrollo y la distribución de contramedidas médicas, como vacunas, productos terapéuticos y diagnósticos, y al acceso oportuno y equitativo a las mismas, así como al fortalecimiento de los sistemas de salud y su capacidad de recuperación con miras a lograr la cobertura sanitaria universal;

Haciendo hincapié en la necesidad de un enfoque integral y coherente para fortalecer la arquitectura sanitaria mundial, y reconociendo el compromiso de los Estados Miembros de desarrollar un nuevo instrumento para la prevención, preparación y respuesta a la pandemia con un enfoque de todo el gobierno y toda la sociedad, dando prioridad a la necesidad de equidad, claro está.

Beneficios de un nuevo convenio, acuerdo u otro instrumento internacional de la OMS

 (b) Una oportunidad para mejorar, actualizar y reforzar el papel de liderazgo y coordinación de la OMS y su función de autoridad directiva y coordinadora de la labor sanitaria internacional a la luz del panorama sanitario mundial del siglo XXI, incluso para mejorar el compromiso con la sociedad civil y el sector privado. Esto podría proporcionar una vía clara a los responsables políticos y a los líderes de la preparación y la respuesta ante una pandemia, apoyando la coherencia y evitando la fragmentación tanto a nivel nacional como mundial. La Constitución de la OMS prevé expresamente la posibilidad de un nuevo instrumento y la OMS tiene experiencia en la gestión de instrumentos de toda la sociedad y de todo el gobierno, incluido, por ejemplo, el Convenio Marco de la OMS para el Control del Tabaco.

(c) Crear un apoyo de los grupos de interés para el nuevo instrumento y sus objetivos de preparación y respuesta a la pandemia, por ejemplo, a través de una Conferencia de las Partes en el nuevo instrumento.

 (d) Fomentar la confianza de los Estados Partes en el nuevo instrumento en los compromisos mutuos de alto nivel para la preparación y respuesta ante una pandemia.

 (e) Anclar el nuevo instrumento en todos los principios que se encuentran en la Constitución de la OMS (Preámbulo), incluyendo el principio de no discriminación y el derecho al disfrute del más alto nivel posible de salud. Estos principios son importantes para promover la equidad y la cobertura sanitaria universal, garantizando un acceso equitativo a las medidas médicas y a los servicios sanitarios, tanto ahora como en el futuro.

(f) Abordar el acceso equitativo a las contramedidas, como las vacunas, las terapias y los diagnósticos. Un marco podría facilitar medidas concretas y mecanismos a largo plazo para desarrollar, fabricar y ampliar las contramedidas mediante el aumento de la producción local, el intercambio de tecnología y conocimientos técnicos para ampliar la capacidad de fabricación y el fortalecimiento de los sistemas de reglamentación.

 (h) Reducir los riesgos que plantean las enfermedades emergentes de origen zoonótico en el futuro, reconociendo que las enfermedades de origen zoonótico se encuentran entre las fuentes más probables de futuras pandemias. Esto podría incluir el fortalecimiento de las plataformas y la vigilancia existentes, el fomento de las asociaciones multisectoriales (sectores de la salud humana, animal y ambiental) y la promoción de contramedidas específicas en consonancia con el enfoque de “Una sola salud”

Muchos Estados miembros destacaron que el desarrollo de un nuevo instrumento sobre preparación y respuesta ante pandemias en el marco del artículo 19 de la Constitución de la OMS podría ofrecer una serie de ventajas. Un instrumento en virtud del artículo 19 de la Constitución de la OMS sería jurídicamente vinculante para los Estados Partes que optaran por ratificarlo, y esta condición jurídicamente vinculante ofrece la posibilidad de prestar una mayor atención sostenida, tanto política como normativa, a la cuestión crítica de la preparación y respuesta ante una pandemia, que un acto no vinculante.

 

José Muñoz