En España, como en Europa, las escuelas privadas que se financian en parte con dinero público, ofrecen una educación de elite que distingue a sus alumnos. Mientras, en las escuelas públicas, cada vez hay menos fondos dedicados a su sostenimiento. El sistema bipartidista español hace que los partidos políticos se turnen para hacer mayor el negocio de la educación que en parte es obligatoria. Se oculta el dinero público dado a los colegios concertados o privados. La educación es un bien estratégico porque gestiona el talento del futuro. La educación es un activo estratégico para la mercantilización privada. Se forman desigualdades del nacimiento al doctorado. Al niño se le enseña que según su categoría educativa, la calidad de su capital humano, le corresponde un salario. Hay materias económicamente no productivas y no se subvencionan siendo la productividad económicamente una falacia. El que estudia estas materias tiene un salario menor (filosofía, literatura, historia…). Hacen ver que es productiva una carrera que trata ligeramente de todo sumando a cualquier perfil de alumno. Las carreras de Humanidades se discriminan cercenando el conocimiento y eliminando la crítica. En España el 68% de alumnos escolarizados estudia en centros públicos. En Europa la media es del 81%. España es el cuarto país de Europa en alumnos públicos es secundaria. Y es el tercer país de Europa que menos población de alumnos tiene en la escuela primaria. El 60% de alumnos de centros concertados pertenece a la Iglesia Católica. La educación es un negocio y España, con Bélgica, Malta y Reino Unido tiene más negocios privados subvencionados públicamente por el gobierno.
El diseño definido para España específicamente por los organismos internacionales correlacionan el modelo económico con la educación. El Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial determinaron que España iba a dedicarse al sector servicios, turístico, y no necesitaba nivel técnico. Pero para la población española la educación es vista como un ascensor social y se ha creado la generación mejor preparada formativamente. Y estos jóvenes se han buscado la vida emigrando al extranjero siendo una carga para España al haber corrido con el gasto de su formación aquí y ejercer su talento fuera.
Los grandes temas educativos los marcan el Banco Mundial, el FMI, la Organización Mundial del comercio, con la obediencia de la Unión Europea. El fin de la educación es adquirir competencias o capacidades. El término competencia proviene de un teórico educativo internacional llamado Von Mises, que fue alto cargo nazi, y sobreviviendo a todas las purgas inspiró el neoliberalismo en las escuelas. Von Mises, con Ferdinand Hayek (que decía que la propiedad privada es la garantía de la libertad), Milton Friedman y otros son los teóricos del neoliberalismo educativo y dictaron mercantilizar la educación y reducirla. Decían que cuantos más estudios tiene una persona mejor se colocará laboralmente (teoría del capital humano). Pero esto es falso con la precariedad de la crisis. Von Mises justificaba el fascismo como el salvador de la civilización europea.
La LOGSE o legislación educativa de Felipe González de 1990 creó una fábrica de ignorantes. Con los recortes financieros se hace ineficaz la educación pública para que los padres paguen una educación privada. La educación se ha convertido en un negocio de 114 billones de dólares a nivel mundial. Es una cifra impresionante y superior a la generada por el tráfico de armas. Las entidades financieras se han dado cuenta y crean fundaciones u oenegés que ofrecían profesores formados por ellos y de su ideología para sustituir bajas de profesores públicos. Así lo público queda dentro de lo privado y no hay diferencia. Esto es porque no puede eliminarse lo público de un plumazo. Esta confusión pretende que se pague por todo, incluso en lo público se van pagando por los padres pequeñas cantidades). Los grandes bancos e introducen en la escuela pública para que desaparezca o acabe residual. Los países con mejores resultados en los informes neoliberales PISA son los países con menos escuela privada (gracias a que las familias apoyan lo público).
Una particularidad de España es que es el primer país de la UE por número de reformas en educación. El baile educativo es constante. En el ranking del CSIC de 2018 sobre las 20 mejores universidades españolas ninguna es privada. La educación de pago es para acceder a un conjunto de contactos que permitan sobrevivir y no a tener conocimiento. La educación se basa en la memoria como papagayos y no crea sentido crítico. La universidad es un foco de corrupción y de control social de los elementos críticos. En China la universidad privada es para los tontos y enchufados y la pública es de nivel y con prestigio para los que valen. La política neoliberal pretende crear una sociedad del conocimiento de ignorantes y mercantilizada.
El Banco Mundial definió la privatización de las escuelas hace 20 años creando una planificación a largo plazo. El documento que elaboró reduce la inversión educativa, la privatización, etc. Considera pública una base educativa de electroescritura y cuentas que es lo mínimo exigido para poder trabajar. El resto de la educación debe ser privada. El FMI no financia fondos a los países que no siguen las condiciones del Banco Mundial. La OCDE es el gran gestor educativo al hacer los informes PISA (evaluaciones de varias materias que permiten hacer un ranking de países). Definen los contenidos evaluables y los estados transigen por miedo a la opinión pública. El Banco Mundial legisla, el FMI financia y el OCDE determina los conocimientos cada vez más livianos y no formativos y que abusan de las redes sociales ( que son un gran negocio y una forma de control social). La privatización lleva a que los alumnos clientes determinen el esfuerzo a emplear para adquirir un título y lo acaban comprando corrompiendo la educación.
La diferencia de rendimiento entre las escuelas públicas y concertadas de España no era de calidad de conocimiento sino la calidad del apoyo familiar a los estudiantes. La escuela pública era mejor en profesorado y, en general, que la concertada, según el informe PISA. Otra variante importante de la escuela privada es que se hacen relaciones sociales con personas de un estatus superior. En la escuela pública hay niños con problemas, negros, marroquíes, gitanos y gente a la que no le interesa estudiar y crea mal ambiente para los niños de padres convencionales. Las subvenciones públicas a colegios concertados solo aumentan el nivel de beneficio de los inversores en educación privados.
La escuela neoliberal impacta en el sistema educativo imbricando la escuela con la empresa (las grandes entidades financieras entran en las escuelas); se persigue que el tipo de conocimiento no sea de fondo sino aplicativo (como funcionan las cosas ahora y hay obsolescencia de instrumentos que cambian continuamente) y esto no permite adaptarse a los cambios por no tener conocimientos amplios; hay que reducir los niveles de conocimiento para tener mas tiempo libre para degenerar con el espectáculo y hacer a los alumnos mas tontos y dóciles; concebir el hecho educativo como si fuera un divertimento, amable, lúdico, etc a pesar de que gran parte del conocimiento requiere esfuerzo intelectual.
Aparte de la eficacia y la competitividad, otro pilar educativo neoliberal es la rentabilidad. El alumno es un cliente de las instituciones educativas y hay que sacar beneficio de ello. Como en EEUU hay que endeudarse financieramente para pagar los estudios y los alumnos se endeudan por casi toda su vida. Las deudas solo las devuelven en su integridad el 30% de sus alumnos pues no les llega con sus salarios. El negocio es redondo pues avalan la deuda los padres. Con la excusa de becas o ayudas al estudio se conceden estos créditos privados.
La corrupción educativa perjudica al prestigio de los profesores (nepotismo, enchufismo, etc), pero muchos son estómagos agradecidos y mediocres muy trepas, tienen un sueldo fijo y han sido moldeados por el neoliberalismo de no significarse, no movilizarse, callar, etc. Muchos profesores están en precario y pierden derechos si tratan de regenerar la educación. Los sindicatos mayoritarios son amarillos, y los de clase aceptan las propuestas de la Administración para recibir subvenciones ante su falta de ingresos. Los sindicatos no movilizan, no cambian la mentalidad ni informan de derechos u obligaciones y no cambian nada. La privatización reduce el número de profesores, sus salarios y empeora sus condic0ones laborales. Ya se están eliminando profesores con las nuevas tecnologías para evaluar por ordenador, etc. Esto afecta las condiciones laborales de los profesores y su estatus social que cada vez es menor.
La revista norteamericana “Time”, en su edición del 24 de septiembre de 2018, en portada, mostraba a una señora de mediana edad sentada en un pupitre diciendo: “Tengo una titulación superior. Tengo 16 años de experiencia. Aparte tengo dos trabajos extra y dono sangre para poder pagar las facturas. Soy profesora en EEUU”. Esto pasa porque se está dejando arrebatar el bien público de la educación por el entretenimiento baldío. La educación es el futuro de nuestros hijos y la población española tiene escasa capacidad de reacción por la crisis y nada cambia la estructura de poder del país. Hay que buscar una alternativa creíble y un modelo social más cierto. Es necesario cambiar las cosas.
